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La tragedia de no tener internet.

Así como si nada, te encontras como todas la noches. No, no tratando de conquistar al mundo, casi... hablando con tus conocidos y boludeando en internet... cuando te das cuenta que nadie te contesta, el timeline del tweetdeck no se mueve... Oh ¿Qué está pasando?
Miras el modem y cual borracho en una pelea, le faltan un par de dientes, mejor dicho se le apagaron varias luces.
OH NO ¿y ahora quien podrá defenderme de las dos opciones más comunes?:
1- Dormir
2- Aburrirme
*Cualquier otra puede aparentar que tengo una vida y no quiero dar ese mal ejemplo.*

Cuestión que me pongo a escuchar musica y suena Yann Tiersen que me deprime a más no poder porque tengo la necesidad de tocar el piano así... tan bien y no me sale (sin hablar de lo que es componer). Pero bueno, igual busco el piano, lo saco de su caja, lo enchufo intento tocar "Comptine d'un autre ete l'apres midi" y cuando el tempo de la mano izquierda y derecha no coinciden, me frustro y me pongo a escuchar Lady Gaga.

En ese interín en el cual pienso que bien me quedaría un traje de cuadril... encuentro una bolsa repleta de fotocopias de lo que alguna vez fue *ingrese aquí sonidito de suspenso” “la facultad” *ahora grillos*... desaparece la imagen en un lento fade y arranca una analepsis de hace un par de meses toda en blanco y negro, en la cual se cuenta mi historia hasta el día de hoy.

La cámara vuelve a mi, estoy sentada, escribiendo los trajines de la vida mientras medito por qué el Open Office no quiere guardar el archivo en .doc. La iluminación se torna muy tenue, me doy cuenta que algo está por pasar, es predecible como en las películas de terror. Pero en mi cerebro sigue golpeando contra los parietales Lady Gaga implorando por seguir adormeciendo las neuronas que desean pensar en algo más.
Y no, no pasó nada... faltaba el sonidito trágico para que eso sucediera. En realidad no se si el sonido ese apareció cuando el modem dejó de dar señales de vida, ese fue el problema, el que me trajo a escribir, el que me dejo en tal estado de shock que hizo que me ponga a hacer algo.

Hace aproximadamente una semana estoy buscando tres teclas que le saqué al teclado, no porque las necesite, va en realidad sí. Quiero hacer un llavero con las teclas Wake up, Sleep e Insomnio(?). No recuerdo cual era la tercera, eso habla mal de mi, pero más mal habla que no sepa donde las guardé. Porque guardar es sencillo pero encontra lo que uno guardó es siempre muy complicado.Y si lo guardó algún otro, olvidate, no aparece nunca más.

Tomo agua, una gota me chorrea por el labio, me causa gracia me caen un par más. Es que, claro si te reis boluda, es obvio que se te va a caer el agua que tenes guardada en los cachetes.

Diría que Nevermind es la antítesis de Keepinmind, acabo de encontrar a mi gran enemigo, o sea mi futuro amor. Neverland, donde jugaba a pegarle a los cocodrilitos, al daytona, al pump. Al Pumper Nic me llevaba mi mamá cuando todavía existía, al igual que con Casa Tía, esas cosas que se perdieron por ahí, que fueron desapareciendo con el pasar de los años. Igual, tengo que admitir que siempre me gustó más mc donalds, la adicción data desde pequeña. Es algo así como, “una vez que probas, no volves”... de los cuernos, de la adicción y de la muerte... nadie se salva.


Todos algún día seremos Alces, que buena idea... me hace acordar a Sugar we're going down de FOB.
Estoy cansada, me duele la espalda y no, dudo que sean por los cuernos. Debe ser el esfuerzo sobrenatural que hago para cazar alienígenas disfrazados de policias metropolitanos, cada día de mi vida.

Me quedan un par de Operas por comer o escuchar... aunque seguramente me queden las orejas llenas de migas si intento escucharlas, hasta ahora ninguna me habló. No se que tipo de registro de voz tienen. Una pena realmente, me hubiera gustado que, aunque sea, gritaran cuando les pegué un mordisco.

Me voy a dormir, me quedó super claro que por más mal romance que tengamos, podes llamar todo lo que quieras, pero no va a haber nadie en casa y no vas a alcanzar mi teléfono. Alejandro, solo bailá.

P.D.: ¿Esto era una carta? Me olvidé, todo esto comenzó a raiz de que me di cuenta que sin internet el porno no existe. Besis.